2 mayo, 2022

“Este oficio que con tanta pasión hacías…”

El 1° de mayo se vivió un emotivo homenaje a “Clavito” en la localidad de Buchardo.

Raúl Oscar Migueles, conocido por todos como “Clavito” fue homenajeado y recordado en la comunidad de Buchardo en el Día de los Trabajadores. Habiendo nacido el 16 de abril de 1943, el conocido zapatero se inició en su oficio de la mano de Eduardo José Castagno y Luis Antonio Castagno, también vecinos de la localidad.

“Clavito” fue por muchos años el zapatero de Buchardo y la zona, habiendo trabajado de zapatero también en el Servicio Militar. Varias generaciones de personas lo conocieron y compartieron momentos con él, dentro de su taller ubicado en la calle Charles Guerrero, donde siempre se lo encontraba reparando algún calzado o pelota, silbando un tango. El 22 de julio de 2005 falleció, dejando un gran vacío en la localidad. El reconocimiento de su labor en el pueblo es hoy homenajeado por la actual gestión municipal, por sus familiares, y por todos los vecinos, quienes lo recuerdan con gran cariño.

Quien haya entrado alguna vez a la zapatería, que se encontraba delante de la casa de Migueles, nunca podrá olvidar ese olor tan particular que había, o el agua del aljibe que tantas veces la familia compartió con los vecinos. Ruth cuenta orgullosa haber sido “la hija del zapatero”, describiendo a su papá como “amante de los caballos, las bochas, el truco; hincha de la Academia y bien radical.”. Además, confiesa que toda la familia aprendió el oficio gracias a Clavito: coser con dos agujas las pelotas y zapatillas, cambiar cierres, clavar clavos, cortar cuero y reciclar son algunos de los legados que Clavito le dejó.

“Con este oficio que con tanta pasión hacías y acompañado de otra gran persona, mamá, nos criaron y nos dieron la oportunidad a mi hermano y a mi, de estudiar en una Universidad Pública”, relata Ruth, graficando con sus palabras la realidad de muchas familias trabajadoras de la localidad. Padres y madres trabajan incontables horas para lograr una realidad mejor para sus hijos, con valores y grandes enseñanzas.

Seguramente este conocido trabajador, “Clavito” para todos los que lo conocieron, estaría orgulloso de la educación que brindó a su familia, pero también a todos los que alguna vez pudieron charlar con él.

Para los que trabajan con las manos

Y para los que trabajan con la cabeza 

Para los que ponen el alma y el cuerpo.

Para los que sueñan con transformar el mundo con su trabajo.